Proveedor de un proyecto que se desmorona.

Todo es posible

No estuvimos cuando todo se vino abajo,

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No vimos las promesas que se rompieron.

Sabemos que detrás de cada factura hay noches sin dormir, familias que dependen del trabajo, incluso cuando las fuerzas ya no alcanzan.

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Sabemos que muchos cumplieron sin recibir nada a cambio, y que lo único que los mantuvo en pie fue la fe en que, algún día, alguien haría las cosas bien.

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Hoy confiamos en poder re-construir juntos un equipo, creemos que cada esfuerzo cuenta.

 

Lo que se hizo con esfuerzo no se perdió. Solo está esperando.

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Y por eso estamos aquí.